¿Te sientes viejo?... Mejor! 💪🏽 Enterremos el ageism de una vez por todas


¿Te acuerdas de Friends?
Quién no, dirás.    

La serie triunfó en los 90, reflejando las inquietudes de una generación. De una generación de jóvenes. En uno de los capítulos de la séptima temporada, repasaban el trigésimo (30) cumpleaños de todos ellos… Y todos lo llevaban… MUY mal.

El mensaje era claro: hacerse adulto y cruzar el umbral de la juventud era decir adiós a la época en la que molabas. Los mejores años de tu vida habían quedado atrás.

Ser ‘joven’ es un invento social bastante reciente

Ser “viejo” no era un “problema” hasta que las sociedades modernas decidieron inventarse “la juventud”. 


Por que sí, es un invento de mediados del siglo XX, cuando todos los atributos guays (la belleza, el carisma, el arte, la moda, las ideas rompedoras,...) pasaron a ser patrimonio exclusive de los jóvenes.   

  • ¿Tienes menos de 30? di hola a #putomolar... porque sí  
  • ¿Tienes más de 30? deberías tener una americana gris, una oficina, 2.1 hijos y una vida repetitiva   
  • ¿Pasas de los 50?... entonces las cosas se ponen aún más serias: es casi imposible que encuentres trabajo o, directamente, te discriminan (esto lo dice la OMS, no nosotros).

Como si a partir de cierta edad, empezaras a restar puntos de cuánto vales, cada año. Como si a partir de cierta edad tuvieras que estar constantemente luchando por aparentar ser más joven de la edad que tienes.

¿El peor enemigo de cumplir años? Quizás tú mismo

Hacerse “mayor” está mal visto en la tele, en el cine, en las series… hasta el punto de que nos lo hemos llegado a creer nosotros mismos:   Cuando eras adolescente… mirabas con desdén a “los mayores”, porque lo que observabas a tu alrededor es que ser ‘joven’ era cool. Fijo que tus propios padres te soltaban algo tipo ‘ay, si yo pillara tu edad…’ como si fuera algo positivo. 

De repente, un día, viste una pata de gallo incipiente… o una cana… o a un GenZ grabando un TikTok… o te llamaron ‘¡Señor!’ por la calle… y te empezaste, sutilmente, a convertir en aquello de lo que te apartabas.   Y, seamos honestos; tú, contigo mismo, puedes ser el más cruel de todos… y sin darte cuenta. El micro-sabotaje que podemos hacernos delante del espejo, a diario y con la guardia baja… es de los más difíciles de identificar.      


El edadismo, entonces, no es solo una lacra social más tipo machismo o racismo… sino una forma indirecta (aprendida) de no quererte a ti mismo. Por ahí no pasamos.

Fight for your right (to be old)

¿Qué podemos hacer contra esto, tan asimilado por todos de forma inconsciente? Pues es un trabajito más mental que físico. Te damos 3 mantras para repetirte por las mañanas en el baño:   


  1. Eres un huevo kinder, macerando 🥚🧸   
    Lo bueno, incluido el atractivo, lo llevas por dentro. Si te encontraras con tu ‘yo’ de hace 10 años por la calle... verías lo niñato que eras y apreciarías lo que las cicatrices y el camino te han enseñado en esta nueva versión mejorada tuya.    

  2. Nunca es tarde para decidir ser joven   
    Ponte lo que te dé la gana, agarra una mochila para irte de viaje…. o tómatelo todo con total calma. SIEMPRE estás a tiempo de todo y sale (siempre) más a cuenta hacer cosas que te den gustito a cumplir las expectativas que otros tienen sobre ti.   

  3. Invierte en la moneda más valiosa; no, no es bitcoines ni NFTs… sino en ti   
    La mayor celebración que puedes hacer de ti mismo (cuerpo y mente) es el autocuidado. Quererte, mimarte y hacerte el amor, como poco, semanalmente (no una paja mal sino… ¿Cuándo fue la última vez que te lo curraste contigo?). 

Tu madurez, arrugas incluidas, en positivo y a tope

Por todo esto rechazamos la idea de ser “menos” cuando envejecemos… ¡Somos muchísimo más!

A nosotros no nos molan los términos que incluyan ANTI (anti-edad, anti-granos, ...). Aunque es cierto que a veces nos “obligan” a utilizarlos para contentar a Google o que se nos entienda 😅

Pero en realidad queremos potenciar el uso y nos pega, mucho más, palabras como PRO-, MULTI-, EXTRA-. Siempre sumando y nunca restando.  Y cada año que pase, seguiremos subiendo de nivel y volviéndonos mejores versiones de nosotros mismos; más felices y más wapos. 

Porque puedes ser tan joven como tú elijas; luciendo arrugas y canas orgullosamente... o cuidando tu imagen porque tú no cambias; cambian tus gustos y los cuidados que te regalas. 

Porque igual que empiezas a valorar un domingo sin resaca o dormir 9 horas seguidas, celebras más; TE CELEBRAS de otras maneras. Y todo eso y a cada momento, sin renegar de las cosas chulas que experimentamos a medida que maduramos. 

P.d: ya sabrás que tenemos una cremita pro-edad: WOWYOUNG

Si tenías pensado pillarla por miedo al paso del tiempo o por necesidad de contentar expectativas ajenas… mejor dale una vuelta antes a tu cabeza. 


Si te la pillas por el autocuidado, inversión en uno mismo, diversión y cancaneo… ALL IN

WOWYOUNG

Cremigel pro-edad de noche con retinol. Minimiza arrugas, líneas de expresión y combate el acné.


Siwon
We do cool right!